*Recomendación de la CNDH confirma un patrón de detención ilegal, ocultamiento y tortura por parte de elementos de la Secretaría de Marina.
Ciudad de México, 21 de febrero de 2019. La Recomendación 18VG/2019 de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), dirigida a la Secretaría de Marina (Semar) por la comisión de detención ilegal, retención arbitraria, uso excesivo de la fuerza y tortura, alerta de los riegos de militarizar la seguridad pública, señalaron tres sobrevivientes de tortura sexual -cuyos casos están comprendidos entre las 15 víctimas de la recomendación- y sus representantes del Centro Prodh.
El 27 de agosto de 2011, Denis Blanco, Korina Utrera y Wendy Hernández–Charly fueron detenidas arbitrariamente en Tabasco y fueron trasladadas a instalaciones de la Semar en Veracruz. Ahí, junto a 11 personas más, fueron torturadas y retenidas ilegalmente por más de 30 horas. Posteriormente se les incriminó por delitos que no cometieron y permanecieron en prisión hasta que se ordenó su liberación en 2016. En las sentencias absolutorias, tribunales federales calificaron como “una escenificación” la versión de los elementos aprehensores y ratificaron que las víctimas habían sido objeto de un proceso penal injusto basado en pruebas ilícitas.
Ahora, la recomendación de la CNDH considera acreditado que los elementos de la Semar realizaron detenciones ilegales e injustificadas, reteniendo a las víctimas y perpetrando actos de tortura, por lo que violentaron los derechos a la libertad, seguridad jurídica e integridad personal de las víctimas, además de los derechos al trato digno y a una vida libre de violencia en perjuicio de Korina, Denis, Wendy y una víctima más. El organismo nacional especificó que las víctimas, en su calidad de mujeres, recibieron un trato indigno y discriminatorio que consistió en la comisión de actos de violencia sexual en su contra, además de estigmatización por su orientación sexual.
Denis, Korina y Charly son parte de la campaña “Rompiendo el silencio”, iniciativa de las mujeres sobrevivientes denunciantes de tortura sexual en los hechos de Atenco para visibilizar el fenómeno y solidarizarse con quienes lo han padecido. El pasado 12 de febrero, Denis Blanco se presentó ante senadoras y senadores en el marco de las audiencias sobre la creación de la Guardia Nacional aprobada hoy y les requirió no dar mayores facultades a las Fuerzas Armadas: “Les pido que hagan conciencia y si quieren a su familia piensen lo que van a hacer porque la verdad no ha sido nada bueno. Mi vida está destrozada, he tenido terapias de todo tipo y no puedo superar lo que me hicieron”.
Para el Centro Prodh y las mujeres sobrevivientes, la recomendación de la CNDH anuncia de manera muy clara los riesgos de persistir en la militarización de la seguridad pública a través de la Guardia Nacional y es un llamado a repensar un modelo que ha agravado la vulneración de derechos de los sectores sociales más vulnerables.
«Es de resaltar que el organismo nacional considera que los hechos objeto de la recomendación no son aislados, sino parte de un patrón de conductas violatorias a los derechos humanos por parte de elementos de la Marina en Veracruz, que comprende señalar que las detenciones ocurrieron en un lugar distinto al real, así como a la comisión de malos tratos, tortura y demoras indebidas en la puesta a disposición de los detenidos. La CNDH recordó que, desde 2011, ha emitido otras 34 recomendaciones a la Semar por violaciones a la libertad y seguridad personal, a la integridad y seguridad personales», señalaron la organización y las sobrevivientes.
La CNDH anunció que presentará una queja y una denuncia por los actos de tortura y recomendó que se inicien los procedimientos necesarios para esclarecer las responsabilidades de los servidores públicos. Señaló que la investigación debe ser exhaustiva e imparcial y considerar la cadena de mando pues “pues se identifica una ilación de hechos que apuntan al ocultamiento de la verdad sobre lo ocurrido teniendo en cuenta que, al excluir de las investigaciones a los mandos, se pierde la oportunidad de evitar la repetición de estas conductas”.
«Al respecto, en 2014 la PGR abrió la investigación 391/UEIDAPLE/DT/M31/2014 y la acumulada 1131/UEIDAPLE/DT/46/2015 sin que hasta el momento haya ninguna persona consignada y sin que la Semar permita el acceso a la base naval para la práctica de diligencias. Es de esperar que la CNDH fortalezca esta investigación y que la FGR vea en ella la oportunidad de sancionar a los responsables para que la tortura no quede impune», finalizaron en un comunicado.