* Sobrecupo en albergues; llaman organizaciones a proteger a las personas en tránsito, especialmente a las vulnerables.
Ciudad de México, 22 de octubre de 2018. El número de personas que huyeron de Honduras en Caravana y hoy buscan refugio en México o llegar a Estados Unidos podría llegar a cerca de 7 mil y los albergues de la zona de Tapachula, Chiapas, se ven rebasados, informaron periodistas y organizaciones que acudieron a la zona.
Save the Children informó que en el parque de Suchiate hay niños y niñas acostados. No les permiten o no quieren entrar al albergue por miedo a ser detenidos. De acuerdo con datos proporcionados por personal del Ayuntamiento de Suchiate a Save the Children, hasta ayer, se habían registrado para su atención 2 mil 665 personas.
El albergue Casa Migrante Saltillo detalló que se trata en total de 7 mil 233 personas: mil 70 niños, mil 307 niñas, 2 mil 234 mujeres y 2 mil 622 hombres. La agencia AP reportó que caminaban más de 5 mil personas; mientras fuentes de Protección Civil dijeron a EFE que se trataba de más de 3 mil los migrantes que recorrieron los casi 40 kilómetros que hay entre Ciudad Hidalgo y Tapachula.
Los migrantes, que dijeron que habían abandonado sus intentos de entrar legalmente a México porque el proceso de solicitud de asilo político es demasiado lento, se congregaron el sábado en un parque de la fronteriza Ciudad Hidalgo. Allí votaron con las manos alzadas en favor de continuar colectivamente hacia el norte.
Los medios también han reportado que hace más de treinta horas que en la caravana nadie sabe nada de las primeras personas que subieron a autobuses. De todos los pasajeros de los últimos dos días, no hay información pública sobre quiénes son ni cómo están. Son más de 380 personas registradas para obtener el estatus de refugiado temporal en México, según la agencia de la ONU para refugiados (Acnur).
Mientras tanto, delegados del Acnur verificaron, junto al procurador de los Derechos Humanos de Guatemala, Jordán Rodas, la situación de cientos de migrantes hondureños que permanecen varados sobre el puente fronterizo entre Guatemala y México.
Por su parte, la Federación Mexicana de organismos Públicos de Derechos Humanos llamó a la protección de los derechos de las personas que avanzan en la caravana, mientras que la Conferencia del Episcopado Mexicano llamó a salir en auxilio de las y los caminantes.