*Emite 10 exigencias hacia el Gobierno del Distrito Federal
México, DF.- En el informe que hoy presentó la Misión de Observación realizada por integrantes del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh), se comprobó las violaciones a derechos humanos cometidas por las autoridades del Distrito Federal durante la marcha conmemorativa del 2 de octubre, a 45 años de los acontecimientos de 1968.
Las principales violaciones fueron documentadas por las y los observadores son: un desproporcionado despliegue de cuerpos policiacos; la utilización por parte de los cuerpos de seguridad de objetos voladores tele controlados o aeronaves radio controladas —conocidos como drones— observando invasivamente la organización de los contingentes; la presencia intimidatoria de granaderos y policía montada a los costados de la marcha
El Centro Prodh comprobó múltiples agresiones a civiles, especialmente hacia quienes buscaban documentar detenciones arbitrarias.
Asimismo, se observó la presencia de policías vestidos de civil, que detuvieron personas, el uso de armas no letales entre los cuerpos policiacos — gases lacrimógenos, extinguidores, escudos, toletes y balas de goma—.
Las y los defensores denunciaron la nula capacidad de los cuerpos policiacos para distinguir entre las personas con quienes se confrontaban y la gran mayoría de manifestantes, incluidos observadores de derechos humanos e integrantes de medios de comunicación.
Durante la marcha del 2 de octubre se violaron derechos humanos: libre manifestación, asociación, expresión, legalidad, seguridad integridad personal, debido proceso, a la vida, derecho a defender derechos humanos, igualdad, información y defensa adecuada.
Ante ello, la organización emitió 10 exigencias para el Gobierno del Distrito Federal, entre las que destacan, que los servidores públicos admitan públicamente su responsabilidad por las acciones y omisiones para garantizar el pleno respeto a los derechos humanos de quienes se manifestaron, documentaron y denunciaron violaciones a los derechos humanos.
Que se inicien las investigaciones tendentes a deslindar las responsabilidades respectivas a los mandos públicos involucrados; que el Secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal, explique y asuma su responsabilidad, por acción u omisión, en las violaciones a los derechos humanos cometidas.
Que se publiquen los informes de las distintas dependencias en torno al diseño, implementación, desarrollo y supervisión del operativo llevado a cabo del 2 de octubre del año en curso.
Que en el marco de la adopción de un modelo de seguridad ciudadana se realice la despolicialización de las manifestaciones públicas, eliminando el enfoque punitivo y criminalizante de los grupos que se manifiestan para transitar a un enfoque integral con perspectiva de derechos humanos que privilegie la lógica constitucional de respeto y garantía de los derechos fundamentales, asegurando al máximo su realización y no su restricción.
Que haya una respuesta política y congruente con una visión de seguridad ciudadana ya señalada en el apartado V, y que derivaría necesariamente en la derogación del Protocolo del Control de Multitudes y del Cuerpo de Granaderos de la SSP-DF. Esto es el principio de la erradicación del Estado policiaco. Informe completo AQUÍ