Estado de México.- La comunidad indígena otomí de San Francisco Xochicuautla, Lerma, Estado de México, recientemente fue hostigada por las autoridades de la entidad, mediante la presencia de cuerpos de granaderos y integrantes de la Secretaría de Seguridad Pública del Ayuntamiento, todos fuertemente armados. El operativo tenía como objetivo dar continuidad al proyecto que las autoridades autorizaron arbitrariamente para la empresa Autopista de Vanguardia S.A. de C.V. (Autovan), que pretende impulsar el proyecto carretero Naucalpan- Toluca.
Más de 70 organizaciones y colectivos firmaron un pronunciamiento donde señalaron que la imposición del proyecto ha desatendido las peticiones de respeto a la población, ya que las autoridades han elegido las acciones violentas y las detenciones arbitrarias antes del diálogo y la mediación, agrediendo no sólo a la comunidad y sus tierras sino destruyendo su territorio.
El grupo de organizaciones exigen a las autoridades federales, locales y municipales actúen con estricto apego a la legalidad y respeto a los derechos humanos, ante la delicada situación que vive el pueblo de San Francisco Xochicuautla. Asimismo, piden que se cumpla la suspensión otorgada vía amparo y en consecuencia se detengan totalmente las obras de la autopista Toluca-Naucalpan.
Las y los pobladores reclaman privilegiar el diálogo y mecanismos de solución pacífica de conflictos, para la solución de la problemática que hoy vive la comunidad indígena, así como el alto a los hostigamientos.
Cabe destacar que el proyecto carretero viola la legislación agraria, ambiental, administrativa e indígena tanto en instrumentos internacionales como nacionales. Asimismo, hay un incumplimiento de las obligaciones de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos de la comunidad y sus habitantes, en abierta violación al artículo 1º constitucional que vincula a todas las autoridades.