Del 5 al 7 de junio se llevó a acabo del “Foro Internacional sobre Desapariciones Forzadas e involuntarias en México”, en Saltillo, Coahuila, el cual fue organizado por Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila (Fuundec). El evento contó con la participación de organizaciones, funcionarios y especialistas que han impulsado el tema nivel nacional e internacional.
Las y los participantes coincidieron en que el Estado mexicano debe reconocer la emergencia humanitaria ante la ola de desapariciones que ha hecho víctimas, a entre 24 mil y 70 mil personas; acordaron crear un Programa Nacional de Búsqueda que dé respuesta inmediata a los casos y una Ley General de Desaparición de Personas que tipifique este delito en todo el país, así como aceptar la examinación del Comité contra las Desapariciones Forzadas de la ONU, entre otras propuestas.
Durante el tercer día del Foro, Rupert Knox, investigador para Amnistía Internacional, refirió que para que exista una credibilidad de parte de las víctimas, y se vaya construyendo un diálogo basado en la confianza, el Estado tiene que demostrarlo. Recalcó que México es un país con todas las posibilidades de solucionar esta tragedia humanitaria pero es necesario que haya un cambio en la actuación de las autoridades.
Por su parte Rainer Huhle, miembro del Comité contra las Desapariciones Forzadas de Naciones Unidas (Ced por sus siglas en inglés), precisó que el Ced no realiza acciones de búsqueda, sino que genera una presión al Estado para la búsqueda y localización con vida de las personas desaparecidas.
Santiago Corcuera, académico de la Universidad Iberoamericana, mostró su indignación debido a que el Estado mexicano no ha reconocido la competencia del Ced e instó a “hacerlo a la brevedad posible”. Corcuera, quien a partir del primero de julio formará parte de dicho organismo internacional, mencionó que si los servidores públicos no reconocen la tragedia humanitaria, ésta no se puede enmendar. Valoró el trabajo que las madres de personas desaparecidas realizan en México para recabar la información y aunque dijo que “no tienen la instrucción y obtienen información valiosísima”, mientras que los servidores, “que se supone tienen la instrucción” no pueden hacerlo.
Cabe señalar que as cientos de familias que investigan la desaparición de sus seres queridos y se reunieron durante tres días en esta ciudad con una exigencia al Estado mexicano: que realice una búsqueda efectiva y científica en todos los casos para que los desaparecidos regresen con vida a sus hogares.