Por Xosé Roberto Figueroa Rivera/Centro Prodh
Remontándonos históricamente, podemos ubicar que las redes sociales (p. e. las redes de la comunidad científica) han sido una herramienta muy importante para generar cambios en la humanidad. Actualmente son las redes sociales en internet las que conforman parte de este proceso de cambio.
No obstante, al leer en Twitter Trending Topics (o TT: etiquetas más utilizadas en un día para reunir conversaciones sobre un tema afín) como #ApestasAIndio, #SeQueEresJotoPorque o más recientemente, #SéFelizYGolpeaAUnaMujer y #TuiteaComoSiTuvierasParálisisCerebral, resulta inevitable cuestionarse si las redes sociales en internet son el medio adecuado para generar el cambio.
Hasta hace un par de años, las redes sociales eran consideradas no más que una actividad de esparcimiento o un medio alternativo de difusión, sin embargo, esta perspectiva cambió con la “Primavera Árabe”, cuando en una relación simbiótica las redes sociales proyectaron este movimiento político-social a un nivel internacional y a su vez el fenómeno situó a las redes como el medio por el cual se articuló la movilización social.
En aquel momento, incluso en nuestro país, las redes sociales parecían no tener mayor función que la de entretener, sin embargo, el contexto de violencia e inseguridad no fue ajeno al mundo de las redes: la ciudadanía comenzó a alertar a usuarios de las redes sociales de lugares donde se estuvieran llevando a cabo enfrentamientos armados. Es necesario señalar que estas acciones llevaron a la censura del medio a través de restricciones legislativas, y más grave aún, a la privación de libertad a algunos twitteros del Estado de Veracruz quienes fueron acusados de “terrorismo y sabotaje”, un hecho sin precedente a nivel nacional.
Más recientemente, durante el proceso electoral del 2012, durante una visita del entonces candidato presidencial Enrique Peña Nieto a la Universidad Iberoamericana, un grupo de estudiantes increpó al candidato por las violaciones a los derechos humanos de habitantes de Atenco cuando era Gobernador del Estado De México. A raíz de estos hechos, las y los jóvenes fueron denominados de “acarreados”, por lo cual las y los alumnos de la Universidad Iberoamericana publicaron un video en Youtube para aclarar que no fueron instruidos por nadie para cuestionar a Enrique Peña Nieto. Como apoyo se creó el TT #YoSoy132 refiriéndose a que el movimiento no está solo.
Lo anterior nos demuestra que las redes sociales en internet desempeñan un papel fundamental a la hora de visibilizar hechos que otros medios de comunicación ocultan, pero sobre todo a fomentar redes de organización ciudadana que no sólo denuncia los abusos, sino defiende los derechos humanos.
Casos como el del movimiento #YoSoy132 y las personas detenidas el 1° de diciembre de 2012 (#1DMX), son claros ejemplos de que las redes sociales deben acompañarnos en nuestro ejercicio por la defensa de los derechos humanos.