“Crimen perfecto” por la “impunidad casi absoluta” ante las desapariciones “generalizadas”: así calificó el Comité de la ONU sobre las Desapariciones la grave situación de México.
Las y los expertos recalcaron que atacar la impunidad requiere de una estrategia integral que ataque sus múltiples causas, entre ellas: la ineficacia en la investigación; el uso desvirtuado de la autonomía de las Fiscalías para negar su cooperación en el proceso de búsqueda; el traslado de la responsabilidad de investigar y aportar pruebas a las víctimas: un sistema procesal penal que aún conserva las inercias del pasado; la falta de coordinación interinstitucional; y la falta de presupuesto suficiente. No se trata de temas que requieran de otra reforma legal más, como las que ya han ocurrido en el pasado; el problema no es normativo sino, ante todo, de voluntad, coordinación y capacidades de Estado.
En este contexto, como señaló el Comité, la lucha en contra de la impunidad es impostergable si lo que se quiere es revertir la crisis y no solamente ofrecer paliativos. Tal y como dijeron las víctimas al Comité, “habiendo injusticia” el alma de la persona desaparecida “nunca descansa”.