La Organización Familia Pasta de Conchos (OFPC) denunció que el siniestro de Múzquiz pudo prevenirse, pues desde octubre se había informado a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) sobre las terribles condiciones de trabajo justamente en este lugar. La comunicación -con fotografías incluidas- se dio porque la CFE es compradora de carbón de la mina. Aunque la empresa paraestatal se deslindó de cualquier transacción comercial, la OFPC mostró el número de contrato para aclarar que el mineral sí es adquirido por la Comisión.
Justamente por ello, las familias de Pasta de Conchos insisten en que hablar de reparación sin medidas de no repetición no contribuye a evitar nuevos siniestros. Por ello, también han lamentado que en el proceso en curso se haya privilegiado la indemnización y, a partir de una concepción limitada sobre quiénes son víctimas, se haya excluido a familiares y defensoras que por años centraron su lucha, no en reparación, sino en rescate y medidas de no repetición.
*Lea el artículo completo en Animal Político