Este nivel de impunidad no puede atribuirse a una única causa, varios factores se conjuntan para generar esta trágica realidad: la falta de perspectiva de género en los operadores del sistema de justicia: policías, ministerios públicos, jueces. La falta de capacidad institucional para hacer frente a esta violencia: tan sólo existen 21 agencias especializadas en feminicidio, 18 estados no cuentan con una. La baja capacidad para investigar en las fiscalías y procuradurías, pocos peritos, malos modelos de gestión y nula articulación entre autoridades.
¿Y las historias detrás de estas cifras? ¿Cómo contar el dolor de estas 4,846 muertes violentas de mujeres en 2019? Alexis de 20 años salió de su casa y no regresó. Su cuerpo desmembrado fue encontrado en bolsas de basura en un fraccionamiento en Quintana Roo. Ingrid Escamilla de 25 años estaba en su casa cuando su pareja la asesinó. Su cuerpo desollado y desmembrado fue localizado al interior de su departamento. Fátima Cecilia de 7 años, estaba afuera de su escuela cuando una mujer la raptó. Su cuerpo con señales de violencia sexual y física fue encontrada en una bolsa de basura días después. Estos son algunos de los casos que captaron la atención mediática, pero no son todos, cada uno está atado a una historia brutal y terrible.
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