La sombra de la pandemia se cierne sobre La Montaña de Guerrero de manera particularmente grave y alarmante. Pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas enfrentan, a causa del coronavirus, una amenaza mayor a su salud y sobrevivencia alimentaria. Así lo expresan en una carta enviada hace 11 días al presidente Andrés Manuel López Obrador y al gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo, la cual no ha recibido respuesta.
Ante la incertidumbre sobre los estragos del Covid-19, los indígenas añaden: la realidad en nuestros pueblos es devastadora: los precios del maíz se han elevado al 100 por ciento
. Lo mismo el huevo, el aceite, el jitomate y productos de limpieza. El trabajo remunerado en el campo no existe en la región y no hay quien nos contrate como peones y albañiles
. Las empresas de hortalizas en el norte recortan personal, por lo que muchos quedaron sin trabajo. La mayoría de nuestros hijos e hijas que están en Estados Unidos se encuentran desempleados, encerrados en pequeños cuartos
, sin derecho a recibir algún apoyo económico de aquel gobierno.
*Con información de La Jornada