Integrantes del colectivo Búsqueda Nacional en Vida por Nuestros Desaparecidos realizaron este jueves un “cacerolazo” frente la sede de la Fiscalía General de la República (FGR) para exigir que dicho organismo atraiga sus casos al ámbito federal y dedique todos los recursos necesarios para buscar a sus familiares, para que no haya “víctimas de primera y de segunda”.
Cerca de las 11 de la mañana, los manifestantes colocaron mantas con fotografías de sus seres queridos y comenzaron a golpear sartenes y cacerolas con cucharas o con las manos desnudas, para llamar la atención de los responsables de la FGR y exigirles una reunión para pedirles que la fiscalía especializada en materia de desaparición atraiga sus casos y haga una búsqueda exhaustiva de sus familiares.
Muchos de los manifestantes —en su mayoría mujeres— se volcaron a pegarle a las cacerolas con dolor y rabia, con lágrimas corriéndoles por las mejillas, como si estuvieran acabando a golpes de cuchara con la indiferencia de las autoridades. Don Jesús Lamas, padre de Irma Claribel Lamas López, le pegó tan fuerte a un sartén que incluso lo abolló y lo rompió.
*Con imagen e información de La Jornada