Con una misa oficiada por el presidente y fundador del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, Miguel Concha Malo, y una caminata a la calle de Avenida del Taller 21, donde perdieron la vida decenas de costureras al caer el inmueble, damnificados del Multifamiliar Tlalpan conmemoraron un aniversario más de los terremotos de 1985 y 2017, los dos más demoledores que han golpeado a esta capital.
En el complejo habitacional de Tlalpan todavía están a flor de piel las heridas dejadas por el sismo de hace un par de años. Los vecinos afectados viven desde hace 24 meses en campamentos improvisados o de arrimados con familiares. El duelo por las pérdidas humanas todavía se respira en este lugar.
“Es una simulación, no es un esfuerzo para prevenir. Los que padecemos las consecuencias de un sismo lo sabemos. No tenemos capacitación mínima de primeros auxilios, para hacer un apuntalamiento o de sacar a alguien de los escombros”, dice Juan Carlos Miranda.
*Con imagen e información de Proceso