¿Cómo ha sido, pues, el papel del Ejército y la Marina en lo que a los arrestos se refiere?
Son las autoridades con el porcentaje de arrestos más bajos con órdenes de detención; son quienes más tiempo retienen a las personas entre el arresto y su puesta a disposición ante la autoridad competente; y, en casi todos los indicadores, son quienes más agreden –por no decir torturan– a quienes detienen.
La imagen que revela la ENPOL es devastadora: Agarran. Retienen. Torturan. Sin que esto siquiera lleve –todo parece– a una sentencia.