México se ha envuelto en un complejo esquema en el que las cabezas de estas redes de corrupción pueden deslindarse diciendo: que fiscalicen mis cuentas, que me investiguen, no van a encontrar dinero público en mis cuentas. (No es que me refiera a las recientes declaraciones de la titular de Sedatu, Rosario Robles, defendiéndose de los señalamientos de millonarios desvíos durante su administración en Sedesol. Eso es mera coincidencia).
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