En el ámbito legislativo, fuimos testigos de la batalla por la Ley de Seguridad Interior, que aún con amplio rechazo fue aprobada sin condiciones mínimas de parlamento abierto. En este complejo contexto, México busca la evolución hacia un modelo de procuración de justicia apegado a los principios del sistema acusatorio, que atienda con eficacia su función de investigar y perseguir delitos.
Primero deberemos cuidar escrupulosamente la definición de la Ley Orgánica, que ponga en el centro el modelo de investigación criminal, la profesionalización de sus servidores y la previsión de controles y contrapesos. Sólo de manera posterior podrá desarrollarse el proceso para designar a su primera o primer Fiscal General, en donde necesitaremos de todos los ojos para vigilar que el procedimiento cumpla con estándares de objetividad, transparencia, participación e idoneidad.
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