*Presentan su libro Metodologías de investigación, búsqueda y atención a las víctimas.
Ciudad de México, 04 de octubre de 2017. En la creación de la Fiscalía General de la República deben desecharse vicios hoy presentes en la Procuraduría General de la República (PGR), como hipótesis abiertas, división excesiva de funciones sin compartir información, fragmentación de la investigación y falta de empatía con las víctimas, entre otros puntos, advirtieron ayer ex integrantes del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI).
Cuatro de los cinco expertos presentaron ayer en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) el libro Metodologías de investigación, búsqueda y atención a las víctimas. Del caso Ayotzinapa a nuevos mecanismos en la lucha contra la impunidad, en el que hacen una serie de recomendaciones metodológicas para abordar indagatorias en las que se presentan graves violaciones a los derechos humanos.
Ángela Buitrago, Francisco Cox, Carlos Beristain y Alejandro Valencia lamentaron la impunidad en la que se mantiene el caso Iguala y denunciaron que se han dado una serie de pactos de silencio entre diferentes actores institucionales que, de romperse, podrían aportar datos relevantes para las investigaciones y para acceder a la verdad y la justicia.
Entre las fallas detectadas por las y los expertos, designados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para supervisar la investigación del caso, se encuentran el haber dejado de lado la propia búsqueda de los 43 estudiantes desaparecidos el 26 y 27 de septiembre de 2014, la falta de acompañamiento a familiares, la estigmatización de las víctimas; la falta de análisis de contexto, la preponderancia de las declaraciones por sobre las pruebas científicas y la falta de uso de tecnología ya disponible para apoyar la investigación.
«El gran problema y la gran complejidad que hubo en esta investigación es que siempre se habló del crimen organizado, pero nunca se estructuró en la investigación, ni cuál era la organización, ni cómo estaba construida», resumió Ángela Buitrago, quien destacó que la PGR no profundizó en su hipótesis, basada en un imaginario colectivo sobre los normalistas que terminó influenciando la indagatoria.
Francisco Cox sostuvo que en expedientes de decenas de tomos, como el del caso Iguala, las fallas pueden pasar desapercibidas, lo que no ocurriría si fueran juicios orales.
Finalmente, las y los expertos recomendaron que las investigaciones de desapariciones en México se hagan en el fuero federal y no en los estados.