¿Qué es lo que ha aprendido el gobierno federal de la tragedia de Ayotzinapa? Un evento cuyo emblema son 43 jóvenes desaparecidos pero que incluyen a los 6 estudiantes muertos como Julio César Mondragón, cuyos cuerpos sí pudieron ser velados por su familia y cuyas vidas cambiaron para siempre.
En tres años, para la sociedad civil se hizo urgente la necesidad no sólo de la existencia de una ley, sino de una con dientes verdaderos que contengan un registro de víctimas de desaparición forzada, que posibiliten investigar y castigar a mandos que ordenen a sus subordinados detener ilegalmente a una persona, la creación de un instituto forense independiente que ayude en la búsqueda e identificación de las personas.
Todas las exigencias de las que en 36 meses se han llenado pancartas que vemos mes con mes en una marcha que se ha vuelto parte de la vida del país, de ninguna el Presidente ha entendido algo.
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