* Alianza Mexicana contra el Fracking señala que la actividad es «inherentemente insegura» y exige su prohibición total.
Ciudad de México, 31 de julio de 2017. Los Lineamientos en materia de seguridad industrial, seguridad operativa y protección al medio ambiente para realizar las actividades de Exploración y Extracción de Hidrocarburos en Yacimientos No Convencionales en tierra, publicados en marzo, y los Lineamientos para la protección y conservación de las aguas nacionales en actividades de exploración y extracción de hidrocarburos en yacimientos no convencionales son «una simulación para pretender proteger el ambiente y las personas cuando existe evidencia suficiente que muestra al fracking como una técnica experimental e inherentemente insegura y devastadora para el ambiente y, por lo tanto, imposible de regular», advirtió la Alianza Mexicana Contra el Fracking.
La coalición de organizaciones señaló que ambos documentos fueron generados por el Ejecutivo para tratar de atender el vacío legal con el que se venía ya practicando fractura hidráulica o fracking en México desde hace años. La Alianza destacó que cada vez son más los países que prohíben totalmente esta práctica, y demandó que México haga lo mismo en vez de simular protección.
Las organizaciones advirtieron que los lineamientos son jurídicamente débiles y hablan de la protección de las personas pero no se les reconoce como sujetos de derechos, «principio básico que debería guiar cualquier regulación que tenga un interés real de proteger». También indicaron que son inoperables debido a la limitada capacidad de inspección de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y Protección al Ambiente (ASEA), por lo que desde la administración federal se ha planteado contratar a Terceros Autorizados para revisar el cumplimiento de la normatividad aplicable sin que se establezcan los procesos de contratación.
«Es de destacar que, en un país donde la impunidad y la corrupción reina, donde las instituciones que debieran vigilar el cumplimiento de la ley son incapaces de hacerlo, se quiera hacer creer que con estos lineamientos quedarán protegidas las comunidades de una práctica experimental que ha generado daños graves en Estados Unidos, Canadá, Australia y Argentina», declaró la Alianza, que agregó que ni la Reforma Energética ni estos lineamientos han seguido procesos de consulta previa, libre e informada para los pueblos indígenas afectados.