El pasado 26 de abril un juez federal resolvió a favor de los indígena para detener la obras del gasoducto Agua Prieta, a lo que la empresa hizo caso omiso y ordenó a su personal la instalación de los ductos de gas natural, que se realizaban por la noche. Dado el incumplimiento de la sentencia por parte de la empresa iEnova, Yaquis cumplieron su amenaza de retirar los tubos y el cableado que la empresa instaló en sus tierras de manera ilegal.
Rodrigo González, representante legal de los yaquis de la zona, informó que la obra pone en riesgo la integridad de sus habitantes por ubicarse a menos de un kilómetro de zonas habitacionales y planteles educativos, y añadió que violenta sus derechos territoriales.
Los Gasoducto de Agua Prieta y Sonora van desde la frontera con Arizona, atravesando 848 kilómetros desde la línea Internacional por Sonora, y cruzando a través de 90 kilómetros más el territorio que habita la comunidad yaqui, entre los municipios de Guaymas y Cajeme.
*Con información de AlSegundo.