Mirna Nereyda Medina Quiñones, de las Rastreadoras del Fuerte, Sinaloa, condenó el asesinato del periodista y escritor Javier Valdez Cárdenas y declaró que no se trata solo “sólo de un gran periodista y una gran persona, sino también de un defensor”. Mencionó que, en el momento en que se supo la noticia, él debía estar iniciando una reunión con mujeres dedicadas a la búsqueda de desaparecidos.
Recordó que “Javier no sólo nos puso el nombre de ‘las rastreadoras’, sino que se ocupó de nuestros niños en su libro ‘Huérfanos del narco’, entre ellas mi nieta, de mi hijo desaparecido Roberto Corral… Permitió que las ‘rastreadoras’ saliéramos de este mundo tan pequeño que es el norte de Sinaloa, para conectarnos con otras mujeres como nosotras”.
Alertó que, con su asesinato, la sensación de las mujeres que buscan a sus seres queridos es de mayor vulnerabilidad porque, para las familias de los desaparecidos en Sinaloa, Javier Valdez fue un aliado. También recordó que Valdez le pidió hace tiempo ‘Mirna, quiero que hagas una memoria con todo lo que has hecho, con la información que tienes de quienes te han amenazado, y me la des a guardar, porque cuando llegue el momento, porque tú estás en gran peligro, yo voy a sacar todas esas cosas que hayas escrito’” Por lo que afirma que” Javier tenía la seguridad de que yo me iba a ir primero que él, y fue al revés ¿Te imaginas cómo me siento?”.
“¿Quién sigue? No sólo pienso en los periodistas, sino en los defensores, en las madres, que después de lo que ocurrió con la compañera Miriam Rodríguez en Tamaulipas, no nos queda duda que estamos en un gran peligro” manifestó.