*En diciembre de 2015, el pueblo ch’ol expulsó a las autoridades oficiales y declaró la autonomía.
Ciudad de México, 03 de agosto de 2016. La incursión de vehículos de la Secretaría de Marina Armada de México (Semar) en el territorio autónomo del ejido Tila, Chiapas, mantiene a esta población ch’ol sumida en la preocupación, pues no es la primera vez que son acosados por autoridades en su lucha por la reintegración de su territorio. El hostigamiento sucede a unos días de que la población celebrase el 82 aniversario de la constitución del ejido y bajo rumores de que se pretende el regreso de las autoridades oficiales, expulsadas por los pobladores en diciembre de 2015.
El día de ayer cerca de las 18:20 horas, cuatro vehículos de la Marina entraron al territorio del ejido presuntamente acompañados por el secretario municipal del ayuntamiento oficial y realizaron rondines. Se reportó también que patrullas de la policía sectorial se acercaban al territorio, ante lo cual las y los ch’oles instalaron un dispositivo de seguridad en las entradas de la población. Hasta el momento no se han reportado más movimientos.
Las tierras del ejido fueron reconocidas a los ch’oles por resolución presidencial en 1934. En 1966 se intentó modificar el plano para entregar 130 hectáreas a la presidencia municipal, pero los ch’oles obtuvieron el amparo 890/77, que ganaron en definitiva en 1994. En 1982, el congreso estatal decretó la expropiación de las 130 hectáreas que ambicionaba el ayuntamiento. Un nuevo amparo de los ejidatarios, el 259/1982, comenzó a tramitarse. Dicho amparo, ganado en 2008 por el ejido, ordenó la restitución de las 130 hectáreas de tierras ancestrales; sin embargo, bajo el falso argumento de imposibilidad para la ejecución de la sentencia, el ayuntamiento municipal la incumplió, motivo por el cual las y los ejidatarios de Tila promovieron el incidente de inejecución de sentencia 1302/2010 ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), pendiente de resolverse.
El 17 de diciembre de 2015, con motivo del séptimo aniversario de la concesión del amparo en favor del ejido Tila que ordena la restitución de una parte de su territorio, y tras la persistente negativa de las autoridades municipales a devolver las 130 hectáreas usurpadas, se llevó a cabo una manifestación que culminó frente a las oficinas de la Presidencia Municipal, donde se declaró la autonomía municipal. Desde entonces, el ejido se ha encargado de los servicios comunes y ha sufrido distintas amenazas y hostigamientos.