* Una vez liberada, fue acosada por elementos policiacos.
Ciudad de México, 17 de junio de 2015. Detención arbitraria, incomunicación y tortura psicológica es lo que sufrió Isis Princesa Rodríguez Rodríguez, de 16 años de edad, a manos de la Policía Especializada de Tonalá, Chiapas, denunció el Centro de Derechos Humanos Digna Ochoa.
La organización civil relata que el 04 de junio, aproximadamente a las 16:00 horas, elementos de la Policía Especializada y de la Policía Estatal Preventiva realizaron la detención arbitraria de Isis Princesa, quien se encontraba en compañía de su novio Jorge Caballero Pineda vendiendo pan en su triciclo.
Los elementos policiacos «en ningún momento presentaron orden de aprehensión, y la menor fue sometida para subirla a bordo de una camioneta tipo Takoma color gris», detalla el centro de derechos humanos. «El comandante de la Policía se refería a la joven diciéndole: ‘no te hagas pendeja y dinos en donde está tu papá'», continuó el relato. Momentos después, los elementos de la policía se trasladaron al domicilio de Areli Salinas, donde golpearon a dos personas más que venían en la parte trasera de las diferentes camionetas para que les indicaran el domicilio de otras personas que andaban buscando «y en ese momento sometieron a la Sra. Areli quien se encuentra embarazada y posteriormente fue detenida».
A las 18:00 horas, Isis princesa y las cuatro personas detenidas fueron trasladas a la Comandancia de la Policía Especializada, en donde fue víctima de tortura psicológica y de incomunicación, pues en ningún momento se le permitió realizar ninguna llamada telefónica para avisar a sus familiares ni tampoco tuvo la asistencia de abogado alguno. La menor de edad fue testigo de cómo eran torturadas las otras personas detenidas que fueron encerrados en un cuarto.
Los familiares de Isis Princesa, desde el momento que fue detenida y hasta alrededor de las 23:00 horas, desconocieron el paradero de la menor, pese a que en varias ocasiones fueron a la Comandancia de la Policía Especializada y a la Fiscalía de Distrito Istmo Costa, donde en todo momento negaron haberla detenido.
Posteriormente, personal del Centro de Derechos Humanos Digna Ochoa se puso en contacto con la Visitadora de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de la ciudad de Arriaga y a la Fiscalía Especializada en Derechos Humanos, Atención a Víctimas y Servicios a la Comunidad de la Procuraduría estatal para solicitarle la búsqueda de la menor. A las 24:00 horas del mismo día fue traslada a la Fiscalía en Atención a la Violencia contra la Mujer y la Familia para que rindiera su declaración ministerial, por lo que en ningún momento fue asistida por abogado de su confianza. Fue puesta en libertad alrededor de la 1:30 de la madrugada del día 05 de junio.
Sin embargo, ese mismo día los elementos de la Policía Especializada catearon el domicilio en donde Isis Princesa vive en compañía de sus hermanos y madre, rompiendo la puerta de acceso principal a la casa, tirando pertenencias y los documentos personales de la familia. Además, un vehículo sin placas se apostóa las a fueras del domicilio y al momento de salir de su casa la siguió durante su trayecto.
El Centro de Derechos Humanos externó su preocupación por la «actuación y práctica recurrente de la Policía Especializada y Policía Estatal Preventiva en Tonalá, Chiapas, quienes detuvieron de manera arbitraria, y torturaron a la menor Isis Princesa», y exigió que se investigue de manera seria e imparcial las violaciones a los derechos humanos cometidas en contra de Isis Princesa y su familia, y que se garantice la reparación de los daños, «iniciando la investigación urgente en contra de los servidores públicos responsables».