* Exigen que se implementen las medidas cautelares otorgadas por la CIDH.
Ciudad de México, 12 de mayo de 2015. Con un “rotundo rechazo a la criminalización” de Nestora Salgado, decenas de organizaciones sociales y activistas respaldaron la huelga de hambre emprendida hace siete días por la coordinadora de la Policía Comunitaria de Olinalá, Guerrero, como protesta por el trato que recibe en prisión y ante el incumplimiento de las medidas cautelares a su favor otorgadas en febrero de 2015 por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), a fin de que el Estado mexicano atendiera las graves violaciones a sus derechos humanos.
Después de una serie de acuerdos establecidos entre la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación federal y los abogados representantes de Nestora Salgado para el cumplimiento de las medidas cautelares, “éstas siguen sin activarse, motivo por el que Salgado García se mantiene en huelga de hambre desde hace cuatro días”, relataron en un comunicado hecho público ayer.
Los firmantes del comunicado advirtieron de un “evidente trato sesgado” en el caso de Salgado “por tratarse de una mujer, una lideresa que retó al crimen organizado y a las autoridades municipales y estatales inmiscuidas en una perversa relación de poder y corrupción”.
Nestora Salgado, presa en el Centro de Readaptación Social No. 4 en Nayarit, está acusada de secuestro, pues el 16 de agosto del 2013 ordenó la detención del síndico Armando Patrón Jiménez, acusado de abigeato y de presunta participación en el asesinato de dos ganaderos, y por la reeducación de dos jóvenes acusados de cometer delitos.
“El acto político de Nestora Salgado de mantenerse en huelga de hambre, representa una clara posición de fortaleza y dignidad que debe ser reconocida por las autoridades responsables de su protección y desde ya, la mejor manera de respetar sus garantías, es implementando adecuadamente las Medidas Cautelares de la CIDH, reconocidas y ratificadas por el Mecanismo de Protección a personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, entidad de la propia Secretaría de Gobernación a la que quedaron incorporadas tanto Nestora como su hija Saira Salgado”, insistieron las organizaciones.
Entre los malos tratos que ha denunciado Salgado están “deficiente atención médica, prácticas de tortura, hostigamiento psicológico y aislamiento que la criminalizan como presa de alta peligrosidad, la obstaculización a su derecho de tener una defensa adecuada, la falta de visitas regulares de sus familiares así como permanecer en detención arbitraria en un penal de máxima seguridad sin sentencia ni condena”, lo que está provocando en ella serios daños físicos, emocionales, psicológicos, morales y legales de difícil reparación e incluso irreparables, enumeró el comunicado.
Después de señalar la legitimidad de los pueblos indígenas para desarrollar sus propios sistemas de justicias, las organizaciones exigieron la inmediata libertad de Nestora Salgado, atención médica integral e independiente y el cumplimiento del resto de las medidas cautelares de la CIDH.