* Más de cien organizaciones exigen que se detengan los ataques.
Ciudad de México, 04 de mayo de 2015. Agresiones físicas y verbales, intimidación con armas de fuego, persecución a familias enteras y retención e intimidación a voluntarias del albergue “La 72” se registraron en un “violento” operativo a cargo del Instituto Nacional de Migración (INM) y la Policía Federal en Tenosique, Tabasco, el 1 de mayo, denuncian un centenar de organizaciones, quienes exigen que cesen las violaciones a derechos humanos de personas migrantes y personal del albergue.
El comunicado explica que más de cien personas migrantes (entre ellas, familias enteras y menores de edad) abordaron el tren conocido como “La Bestia”, ante la presencia de dos vehículos, uno del Grupo Beta y otro de la policía municipal. “Luego se escuchó cómo uno de los operarios del tren decía por radio que éste no se iba a mover hasta que llegaran las autoridades”, indican.
“Alrededor de las 20 horas, se desató una fuerte persecución contra las personas migrantes que se encontraban en las vías del tren y alrededores, dirigido por el Subdelegado federal y el Delegado local del Instituto Nacional de Migración (INM). En el mismo participaron al menos tres vehículos de la Policía Federal (PF), dos volantas y dos vehículos pick up del INM, un vehículo del Grupo Beta, y un vehículo privado pick up de color rojo y doble cabina con placa de Tabasco VS-34-621, perteneciente al subdelegado anteriormente mencionado”, relatan.
Las y los voluntarios del albergue La 72 atestiguaron que se realizaron múltiples detenciones usando agresiones verbales y físicas; que los participantes en el operativo hicieron uso de la fuerza para bajar a algunas personas del tren mientras el carguero estaba en movimiento, “arriesgando su integridad de manera innecesaria”; que el operativo generó enfrentamientos entre migrantes que intentaban salvaguardarse y agentes del INM que realizaron “uso y abuso excesivo de la fuerza”; que la persecución se extendió de la estación del tren hacia las calles adyacentes a La 72, lo que ocasionó la separación de numerosas familias y mamás de sus niñas y niños, algunos de los cuales “regresaron a la casa asustados y en estado de shock después de lo vivido.”
Además, indican, los agentes del INM aseguraron en un vehículo a dos voluntarias del equipo de La 72 que realizaban labores de observación, reteniéndolas por más de 30 minutos. Acusan que los participantes en el operativo emplearon medidas coercitivas para obstaculizar la labor de observación y documentación del equipo de La 72; que recurrieron a medidas intimidatorias y disuasorias con el objetivo de impedir el trabajo de documentación; que algunos agentes utilizaron sus focos para impedir la toma de fotografías, y que el Subdelegado federal del INM vertió comentarios ofensivos contra las personas aseguradas y Fray Tomás Gonzáles, director del Albergue.
De acuerdo con el comunicado, las medidas intimidatorias continuaron en la mañana del 2 de mayo con la presencia de la pick up roja del Subdelegado federal del INM en las inmediaciones de La 72.
Ante la queja levantada por el personal del Albergue, la Comisión Nacional de Derechos Humanos tomó 25 testimonios en el albergue y dos más de personas detenidas durante el operativo.
Las organizaciones exigen que cesen de manera inmediata los operativos de aseguramiento que violentan los derechos humanos de las personas migrantes; que se no se deporte y se garantice la protección de los derechos de las personas detenidas en el operativo, con especial atención en la solicitud de condición de refugio y en las personas sujetas a condiciones especiales de vulnerabilidad; que la CNDH supervise el cumplimiento de los derechos humanos de las personas aseguradas; que se respeten las medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para garantizar la vida y la integridad física de Fray Tomás González, el personal de La 72 y las personas migrantes alojadas en el Hogar – Refugio; y que se tomen las medidas necesarias para respetar el ejercicio a defender los derechos humanos por parte del equipo del albergue.