* Esperanza Hernández enfrenta campañas de difamación y amenazas por su labor, denuncian.
México, DF, 28 de abril de 2015. La Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en México (RNDDHM) expresó su preocupación por la situación de vulnerabilidad y el nivel de riesgo en el que se encuentra la defensora de derechos humanos Esperanza Hernández Lugo, derivados de las amenazas de muerte recibidas por su labor en pro de las familias de Sinaloa desplazadas por la violencia.
Desde 2012, Esperanza Hernández acompaña a familias que al igual que ella, fueron desplazadas de 40 comunidades en la región de la Sierra Madre Occidental en Sinaloa, «luego del conflicto territorial entre agentes estatales y no estatales, que no ha sido resuelto por el gobierno que usted encabeza y que contrario a ello, ha puesto en vulnerabilidad la vida de la defensora y de las familias desplazadas», señalaron las defensoras de derechos humanos en una carta pública dirigida al gobernador Mario López Valdés.
Durante el primer semestre del 2012, aproximadamente 600 familias fueron forzadas a desplazarse internamente en el estado, asentándose en municipios como Culiacán y en la ciudad de Guamúchil, cabecera del municipio de Salvador Alvarado, luego de los ataques de violencia por parte de agentes no estatales a miembros de las comunidades y familias oriundas de la región.
«Desde esa fecha, Esperanza Hernández, defensora comunitaria y líder de las comunidades desplazadas, representante de quienes se asentaron en la ciudad de Guamúchil y Culiacán, ha trabajado para visibilizar la situación de vulnerabilidad en la que se encuentran las familias, y desarrollado gestiones ante autoridades municipales, estatales y federales para que se reconozca su condición y garantice de manera pronta y efectiva su derecho a una vivienda digna, alimentación, trabajo, educación y salud», detalla la red de defensoras, que señala que lejos «esta labor le ha traído como consecuencia una serie de agresiones en su contra, entre ellas campañas de difamación y amenazas», cuyo episodio más reciente ocurrió el pasado 7 de marzo de 2015, cuando un familiar suyo recibió una llamada telefónica a través de la cual le dijeron que si Esperanza no salía de donde estaba y dejaba de hacer lo que hacía –refiriéndose a su labor como defensora– la iban a matar.
«Esperanza Hernández ha recurrido al Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas del Gobierno Federal para exigir medidas de protección, y a otras instancias nacionales e internacionales como la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para informar sobre las agresiones en su contra», advirtieron las 180 defensoras de 22 estados de México.
La Red urgió al gobernador sinaloense a tomar de manera urgente las medidas necesarias para salvaguardar la vida e integridad física de la defensora Esperanza Hernández Lugo y de las familias desplazadas; implementar un mecanismo seguro e integral para garantizar el retorno de la defensora y de las familias desplazadas a su lugar de origen, estableciendo las medidas de seguridad necesarias en el domicilio de la defensora; hacer las investigaciones necesarias para conocer y castigar a los autores materiales e intelectuales de las agresiones; garantizar el ejercicio pleno de la labor de Esperanza Hernández como defensora de los derechos humanos; y tomar las medidas necesarias y diseñen las políticas públicas para garantizar a la defensora y las familias desplazadas su derecho a la vivienda, trabajo, alimentación y educación.