* Peritos independientes confirmaron identificación de restos de Brenda Damaris González Solís
México, DF, 19 de febrero de 2015. Al calvario sufrido por la familia de Brenda Damaris González Solís, que tuvo que buscar a su hija víctima de desaparición por casi cuatro años hasta que finalmente sus restos fueron identificados por el Equipo Peruano de Antropología Forense, se agrega ahora la imposibilidad de recuperar su cuerpo inmediatamente debido a errores en su acta de defunción, lo que supone un revictimización, como sostiene Fuerzas Unidas por nuestros Desaparecidos/as en Nuevo León (FundeNL).
El acta de defunción, emitida por el Registro Civil, señala que Brenda murió en su domicilio, lo cual es erróneo, además de que uno de los supuestos testigos de la muerte es una mujer a quien determinan como ‘padre’ en el parentesco, precisó a Animal Político Leticia Hidalgo, integrante de FundeNL.
La familia solicitó al agente del ministerio público de la agencia de homicidios número 1, Rubén Aguilar, la entrega inmediata del cuerpo; también pidió apoyo para esto a Aixa Alvarado, titular de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas del estado. Sin embargo, señaló la funcionaria, el cuerpo de su hija no les será entregado hasta que el acta de defunción sea corregida, lo que puede tardar hasta tres meses.
“Denunciamos enérgicamente la re victimización de las personas que deben afrontar estos terribles tratos por parte de los servidores públicos de Nuevo León, quienes deben procurar la justicia y recuperar el tejido social tan dañado en todo México”, acusó FundeNL en un comunicado.
Brenda Damaris Gonzáles Solís fue desaparecida el 31 de julio de 2011 en el municipio de Santa Catarina, Nuevo León. Tras sufrir un percance vial, se comunicó con su familia para informarles del accidente. En el transcurso de la llamada informó que estaba llegando una patrulla de Tránsito de la policía municipal y cortó la llamada. Desde entonces no había certeza de su paradero y las investigaciones del caso por parte de la Procuraduría Estatal fueron insuficientes para esclarecer el caso; además, no existe ningún detenido en las averiguaciones a pesar de que se tiene identificados a dos policías de Tránsito que estuvieron presentes en el lugar del accidente.
Ante el cúmulo de irregularidades en la investigación, en la entrega de restos y ante la indolencia del estado para proporcionar certeza de la identidad de los mismos, FundeNL solicitó a la Procuraduría de Nuevo León autorizar un peritaje independiente que diera certeza a la familia González Solís. El peritaje comenzó el día 10 de septiembre de 2014 y fue realizado por el Equipo Peruano de Antropología Forense.
Los resultados de los análisis de los restos correspondieron con Brenda Damaris González Solís. El resultado se hizo público el 16 de febrero de este año, y se solicitó de inmediato a la Procuraduría estatal la restitución digna de los restos a la familia, lo que se ha visto impedido por los errores del Registro Civil.
Leticia Hidalgo sostuvo ante la reportera Daniela Rea que el proceso de exhumación e identificación de los restos ha sido emocionalmente muy difícil para la familia, pero el obstáculo para poder recuperar su cuerpo y enterrarlo los ha lastimado aún más: “Además de estar revictimizando a la familia con el retraso de la entrega del cuerpo, está pendiente el tema de justicia. No han hecho nada, ni siquiera hay un indicio, un dato de quién pudo ser el responsable o los responsables de la desaparición y asesinato de Brenda Damaris. Hay una deuda del gobierno con la familia”.