Después del enfrentamiento del pasado 30 de junio, entre el Ejército y presuntos delincuentes, en Tlataya, el Gobernador del Estado de México califica la actuación de miembros del Ejército como “legítima defensa”, que es una figura jurídica en la que se justifica la comisión del delito y no genera responsabilidad penal. Pero para que exista legítima defensa debe haber proporcionalidad entre el ataque y la defensa. ¿Cómo puede asegurar Eruviel Ávila que hubo legítima defensa si hay 22 civiles muertos y sólo un militar herido?
Lo que estratégicamente Eruviel Ávila no menciona es que la acción del Ejército fue tan contundente que fueron 22 personas las que murieron en el enfrentamiento. Veintiún hombres y una mujer, todos civiles. Si las 22 personas que fallecieron eran delincuentes o no, nunca lo sabremos, porque no tuvieron acceso a un juicio justo, los mataron y ya. / Paola Zavala Saeb/Animal Político