Rarámuris, Wirikuta y los acuerdos de San Andrés Larráinzar / Jaime Martínez Veloz, en La Jornada. La paradoja de la región tarahumara, tan rica en recursos minerales, es el hambre y la miseria de quienes ahí habitan: raramuris, tepehuanes, odamis, pimas y warijoos. También los pueblos wixarikas sufren el despojo y el desplazamiento de sus lugares de origen debido al otorgamiento de concesiones mineras a empresas canadienses del centro ceremonial de Wirikuta. ¿Por qué tanta pobreza en regiones tan prósperas económicamente? ¿A quiénes se les dan las concesiones? ¿De qué tamaño son los beneficios económicos de la explotación minera y cuánto comparten con sus pobladores? ¿Qué importancia tienen hoy los acuerdos de San Andrés Larráinzar?