Ayer en Xalapa, el Secretario de Gobernación, Alejandro Poiré Romero, dijo que el país «no está en guerra ni se puede hablar de un conflicto armado». Además, desde su muy particular punto de vista, señaló: «Hoy toda violación a los derechos humanos, que desafortunadamente ha llegado a ocurrir, es investigada, es sancionada, con todo el rigor de la ley. Dichas reprobables violaciones constituyen una verdadera excepción y de ninguna manera son la regla, lo sistemático de las Fuerzas Armadas y las instituciones de procuración de justicia es la observancia de los derechos humanos».
Incluso, le ratificó al Presidente que en esta lucha no está solo, sino que cuenta con un pueblo firme y decidido.