Los seres queridos de José Ángel extrañan sus risas, las bromas, los abrazos, y hasta los pases para gol. Hoy sería maestro pero lo desaparecieron.
Los seres queridos de José Ángel extrañan sus risas, las bromas, los abrazos, y hasta los pases para gol. Hoy sería maestro pero lo desaparecieron.