MEDIO: La Jornada
TIPO: Periódico
AUTORÍA: Sergio Ocampo Arista
FECHA: 16 de julio de 2015
Iguala, Gro. Padres de familia de los 43 alumnos de la Normal Rural de Ayotzinapa desaparecidos y miembros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (Ceteg) se enfrentaron con elementos de la Policía Militar (antimotines) frente a las instalaciones del 27 batallón de infantería con sede en el municipio de Iguala.
Poco después de las 10 de la mañana, los contingentes comenzaron una marcha rumbo a las instalaciones militares, para exigir que el gobierno federal permita al grupo independiente de expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) interrogar a oficiales del 27 batallón, pues no descartan que participaron en la desaparición de los 43 normalistas, ocurrida el pasado 26 de septiembre.
Entre consignas como ¡asesinos, asesinos! «¡Así hubieran cuidado al Chapo Guzmán Loera», los contingentes llegaron a las puertas del 27 batallón de infantería, donde ya los esperaban unos 300 policías militares que los amenazaron lanzando al aire balas de goma y gas lacrimógeno, con intención de dispersar la protesta.
Previamente, Vidulfo Rosales Sierra, abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, aseguró que está muy claro que el 26 de septiembre los soldados recorrieron las calles y estuvieron en la escena del crimen, por lo que es evidente que tienen responsabilidad en la desaparición de los normalistas.
No tenemos la menor duda de la participación de elementos del Ejército Mexicano; hay evidencia de su participación, ellos revisaron el expediente y hay datos que indican que estuvieron presentes el pasado 26 de septiembre y fueron hacia el centro de salud Cristina, y por eso saben del paradero de nuestros compañeros, agregó.
Le preguntamos al Ejército Mexicano por qué se niegan a comparecer (autoridades del 27 batallón) ante los expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, y por qué se niegan a que se inspeccionen este y otros cuarteles, y por eso cuál es el motivo de la cerrazón y la negativa para transparentar a las fuerzas armadas, reclamó.
Una madre de familia, identificada como María, intervino en el mitin y al dirigirse a los militares dijo: ustedes tienen familias, tienen hijos; aquí estamos madres y padres de familia, porque ustedes se llevaron a nuestros hijos.
En ese momento los contingentes retiraron los alambres de púas que impedían el ingreso al cuartel militar, y se inició la confrontación. Entre golpes y empujones, los grupos lograron penetrar unos tres metros, pero fueron replegados por los policías miliares, que dispararon al aire balas de goma y gas lacrimógeno.
Después de 30 minutos, los contingentes se trasladaron al centro de Iguala y realizaron un mitin en la Plaza de las Tres Garantías.
** Un grupo de familiares de estudiantes lanzaron piedras y cohetones: Sedena
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó que un grupo de familiares de los estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa desaparecidos arrojaron piedras y cohetones hacia el interior del 27 batallón de infantería, en Iguala, Guerrero, como parte de una manifestación que realizaron afuera de las instalaciones militares, a las cuales pretendían ingresar para realizar una búsqueda personal.
En un comunicado, la dependencia precisó que a las 11:05 horas de este miércoles, un grupo que se identificó como normalistas y familiares de los alumnos desaparecidos (el año pasado) se concentraron frente al acceso principal del 27 batallón de infantería, para exigir que una comisión de derechos humanos, sin precisar de qué organismo estaría integrada la citada comisión, ingresara a las instalaciones del campo militar para realizar la búsqueda de los normalistas desaparecidos.
La Sedena añadió que los manifestantes derribaron parte de la reja principal, pero no lograron ingresar a las instalaciones del campo militar.
Durante el acto no hubo personas heridas ni lesionadas y la participación del personal militar fue para salvaguardar la integridad física del personal militar y de sus familias, así como la de las instalaciones militares, apegando su actuación en todo momento a lo establecido en el manual del uso de la fuerza, de aplicación común a las tres fuerzas armadas con estricto apego y respeto a los derechos humanos, destacó la institución.
La Sedena añade que agentes del Ministerio Público tanto de la Procuraduría General de la República como de la Procuraduría General de Justicia de Guerrero, así como un observador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos tuvieron conocimiento de la manifestación de los normalistas de Ayotzinapa.