MEDIO: Reforma
TIPO: Periódico
AUTORÍA: Diana Baptista
FECHA: 09 de abril de 2015
Casas de migrantes exigieron que el Gobierno mexicano frene el Plan Frontera Sur debido a que aumentaron las violaciones de derechos humanos de personas migrantes.
Unidas bajo el Colectivo de Defensores de Migrantes y Refugiados (Codemire), las organizaciones reclamaron que el reforzamiento de la frontera obligó a los migrantes a seguir 12 nuevas rutas controladas por el crimen y autoridades, donde incrementaron las extorsiones, secuestros y violaciones.
«Exigimos enérgicamente al Gobierno federal que se frene el Plan Frontera Sur dadas las incongruencias que existen entre sus objetivos, líneas estratégicas y las acciones implementadas. (También) que ningún plan de esta magnitud vuelva a ser operado sin el escrutinio de la sociedad como lo está siendo el plan Frontera Sur», expuso la Codemire en conferencia.
Alejandro Solalinde narró que 20 por ciento de los migrantes que llegan al albergue que dirige en Oaxaca son víctimas de la delincuencia, un 5 por ciento más que las registradas antes del plan Frontera Sur.
Aunque denuncian los delitos ante la Procuraduría de Justicia, son detenidos por el Instituto Nacional de Migración (INM) antes de que puedan iniciar sus trámites migratorios.
Norma Romero, quien encabeza el grupo de Las Patronas, reveló que antes brindaban ayuda a 600 o 700 migrantes a bordo del tren La Bestia. Sin embargo, después de la aplicación del Frontera Sur, ahora atienden de 50 a 60 migrantes.
Por su parte, Leticia Gutiérrez, directora de SMR Scalabrinianas Misión para los Migrantes y Refugiados, agregó que los migrantes ya no pueden llegar a las 70 casas que les brindaban apoyo en su ruta migratoria, puesto que ahora deben recorrer caminos alejados de ellas.
La falta de vigilancia por parte de las casas ha impactado, según Gutiérrez, en que los activistas desconozcan qué grupos del crimen organizado son los responsables de los delitos contra migrantes.