MEDIO: El Economista
TIPO: Periódico
AUTORÍA: Ana Langner
FECHA: 16 de julio de 2014
A lo largo de dos días, el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, solicitó en México avances para defender a los migrantes, un discurso que, a decir de especialistas en temas de religión y migración, se desprende de una nueva agenda establecida por el papa Francisco y la necesidad de la Iglesia de pronunciarse sobre emergencias internacionales y con ello alejarse de críticas como la que desató los casos de los sacerdotes pederastas.
En entrevista, Gabriela Juárez, coordinadora del Observatorio Eclesial, explicó que el mensaje responde a una presión efectuada por la sociedad civil y expresó la necesidad de que el discurso no quede sólo en un pronunciamiento y responda verdaderamente a la agenda establecida por el papa Francisco de tener una Iglesia para los pobres.
En tanto, el internacionalista y Coordinador del Programa de Asuntos Migratorios de la Universidad Iberoamericana, Javier Urbano, explicó que a su llegada, el papa Francisco presentó nuevos temas dentro de la agenda del Vaticano, mismos que busca difundir.
Asimismo, explicó que el Estado del Vaticano, al pronunciarse en pro del tema migratorio, le brinda la oportunidad a la Iglesia de pronunciarse en el debate público y mostrarse más allá de las críticas a las que se ha visto sometida.
La crisis humanitaria que presenta el fenómeno migratorio es un tema global en el que se requiere una postura y posición por parte del líder jerárquico de la Iglesia católica, quien como reciente actor global no puede estar ajeno del debate.
Denise González, del área Ínter nacional del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, expuso que la voz del Vaticano se une a las de la sociedad civil que han pugnado por la protección de las personas migrantes y por su carácter político genera mucho peso.
Expuso que tradicionalmente México responde más a los estímulos de actores internacionales que a las demandas al interior. El hecho de que el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, se pronuncie al respecto, es foco de mucha presión, misma que «esperemos se traduzca en llevar acciones concretas, planeadas para resolver la crisis humanitaria y que demuestre voluntad política y actitud consistente».
El director del albergue Hermanos en el Camino, Alejandro Solalinde, dijo sentirse alentado con la postura del Vaticano en torno a los migrantes y expresó su deseo por que los compromisos se vuelvan acciones.