MEDIO: Norte Digital
TIPO: Periódico En-Línea
AUTORÍA: Ricardo Espinoza
FECHA: 15 de noviembre de 2013
Chihuahua.- El fiscal general del estado, Jorge González Nicolás, optó por omitir comentario alguno por su participación inicial en defensa de Israel Arzate cuando fungió como coordinador de la Defensoría Penal Pública y ahora, como persecutor bajo su cargo al frente de la dependencia citada.
NORTE buscó en dos ocasiones entablar comunicación con el funcionario estatal a fin de contar con su postura y explicaciones sobre su actuación como titular de la Defensoría Pública, tiempo en el que la defensa de Israel Arzate Meléndez estuvo a cargo de la instancia señalada y bajo su conocimiento.
A pesar de la apertura para que González Nicolás manifestara su versión de los hechos no hubo respuesta a la petición de entrevista de NORTE, ni comentario alguno al respecto por parte de los canales oficiales de la dependencia.
El hecho recibió las críticas por parte de la Federación Estatal Chihuahuense de Colegios de Abogados, así como por el Centro de los Derechos Humanos Agustín Pro, quienes consideraron que el hoy fiscal general del estado jugó con dos roles diferentes.
Al respecto, Simón Hernández, del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro, dijo en entrevista a NORTE que ante esta conducta no se descarta una posible responsabilidad administrativa o penal en contra de Jorge González Nicolás.
Aun cuando el fiscal no era quien estaba a cargo directamente del caso de la defensa de Arzate Meléndez, estuvo a su cargo la designación del defensor público, así como de supervisar el avance de la defensa.
Mientras que Israel Arzate continúa detenido, luego recluido en arraigo domiciliario, González Nicolás llegó a la Fiscalía Zona Norte y hace poco tiempo a la Fiscalía General del Estado.
Luego de la liberación del inculpado por el asesinato de 15 jóvenes en Villas de Salvarcar, Jorge González Nicolás recibió en las instalaciones de la Fiscalía, en la ciudad de Chihuahua, a un grupo de familiares de las víctimas mortales de ese atentado, donde señaló que aún no se determinan las acciones a seguir en un intento para volver a encarcelar a Arzate Meléndez.
Las familias de las víctimas reclamaron la libertad de la personas a las que acusan de haber participado en el asesinato, así como la actuación de las organizaciones no gubernamentales y de la propia ONU, a favor del supuesto responsable.