Desde hace quince años los pueblos indígenas del sur del Istmo de Tehuantepec se han organizado para defender su territorio, contra la invasión de campos eólicos, proyectos mineros y hoy el Corredor Interoceánico. Al centro de la resistencia, están las mujeres, que tejen nuevas redes de organización.
Así describe la articulación de las Asamblea Aline Zárate Santiago, de Liberación Ixtepecana, otro colectivo de la región que está adscrito a la Asamblea. “Me parece que la forma organizativa acá en la región, de alguna manera, aunque nunca se ha tomado esa frase de justicia ambiental, es lo que se ha estado haciendo, lo que hace la Asamblea de Pueblos Indígenas del Istmo. Es eso, reivindicar la justicia ambiental en contra del mal llamado capitalismo verde, del que se habla con los parques eólicos. Quizá en alguna otra región del mundo traen beneficio, o pueden contribuir al medio ambiente, pero en la región del Istmo no es así, de entrada porque los pueblos en los que están instalados no fueron consultados.
“Entonces desde ese punto de vista ya estamos mal, ya no hablamos de justicia, y menos de justicia ambiental”, continúa Aline Zárate. “Si no hay justicia social, tampoco habría justicia ambiental. O sea, yo creo que para hablar de justicia ambiental, tenemos que pensar un poco en justicia social y es una cuestión que no hay aquí, en México digamos, pero en la región del Istmo, con este tema de los megaproyectos, menos existe, porque son una cosa que viene impuesta. Los parques eólicos, la minería, el Corredor Interoceánico”.
* Retomado de Pie de Página