Ciudad de México, 18 de octubre de 2021. Organizaciones defensoras de derechos humanos denunciaron que el 12 de octubre del 2021, un grupo de aproximadamente ocho desconocidos armados irrumpió y amenazó a personas defensoras de derechos humanos presentes en el Albergue Casa Betania Santa Martha, en Salto de Agua, Chiapas.
Los hombres exigieron entrar al albergue bajo el argumento de que venían de “la Fiscalía” a verificar la presencia de una menor de edad presuntamente desaparecida, pero sin presentar ningún tipo de identificación como autoridades ni documentos que autorizaran su entrada. Ante la negativa de las y los defensores de los migrantes, los hombres intentaron tirar la puerta con piedras, apuntaron contra el personal y amenazaron con “llevárselos” y acusarles de secuestro y retención ilegal de menores.
Tras la amenazas, cuatro de los hombres armados ingresaron al albergue. De a cuerdo con información de las organizaciones, dos individuos retuvieron de forma violenta al psicólogo del albergue y le exigieron darles acceso a la base de datos del lugar. Además, un migrante fue agredido al tener su celular en la mano. Los individuos armados revisaron su celular mientras le ordenaban descubrir su rostro e informar sus datos.
Policías uniformados y elementos de Protección Civil llegaron al lugar mientras el allanamiento estaba en proceso, pero se abstuvieron de intervenir y tampoco levantaron denuncia o información formal sobre el hecho. Los hombres armados abandonaron el albergue después de verificar que la menor presuntamente desaparecida no estaba en el lugar.
La Casa Betania Santa Martha es un albergue de tránsito que provee hospedaje, alimentación y servicios básicos de salud a personas en tránsito en Salto de Agua, Chiapas. El albergue está a cargo de cinco Sacerdotes del Verbo Divino y cuatro Hermanas Franciscanas Misioneras de María (FMM), además de personas voluntarias.
Esta es la tercera ocasión en el año 2021 que individuos desconocidos intentan entrar al albergue con el argumento de una supuesta menor de edad desaparecida. En junio y julio de 2019 también sucedieron hechos similares, como se documentó en el informe elaborado por Front Line Defenders, el Programa de Asuntos Migratorios de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, y la Red Todos los Derechos para Todas y Todos, Defensores Sin Muros.
«Los hechos se dan en un contexto en el que otras organizaciones defensoras de personas migrantes en la frontera sur de México, en particular en Chiapas y Tabasco, también han sido hostigadas y agredidas por su labor de defensa de derechos humanos, ante el incremento de los flujos migratorios en la región», advirtieron las organizaciones.
Las y los defensores expresaron su preocupación ante los hechos y llamaron a un alto inmediato a las agresiones y amenazas en contra de las personas que trabajan en los albergues; también exigieron a las autoridades competentes la implementación de las medidas de protección necesarias a fin de evitar el escalamiento de estas agresiones.
«Las organizaciones firmantes instan a las autoridades mexicanas a que reconozcan y permitan sin obstrucciones la labor de asistencia humanitaria y acompañamiento que realizan las personas defensoras de los derechos humanos de las personas migrantes», finalizaron.