Silencio. Un grupo de mujeres camina por el monte y no se oyen más que sus pisadas sobre piedras y ramas secas debajo de sus huaraches. Frente a unos árboles de palo verde detienen su marcha y se colocan una junto a la otra, luego cubren sus rostros con otras caras que no son las suyas, sino de siete yaquis desaparecidos: sus esposos, padres, hijos y hermanos impresos en hojas a blanco y negro.
“¿Jaksa jipuwame?”, se preguntan en lengua yoeme, “¿Dónde están?”.
Hace dos meses que no lo saben. Sus familiares desaparecieron el 14 de julio de 2021 en una zona cercana a Loma de Bácum, uno de los ocho pueblos yaquis ubicados al sur del estado de Sonora, junto a tres “yoris” —hombres que no pertenecen a la Nación Yoeme—, sin dejar rastro que lleve a su paradero.
* Retomado de Pie de Página