En el cumpleaños número 58 de la periodista Miroslava Breach Velducea y a un mes del término del gobierno de Javier Corral Jurado, activistas colocaron este sábado una placa conmemorativa para no olvidar que su asesinato continúa impune y que “el silencio es complicidad”.
“A Miroslava Breach no sólo la mataron, la mandaron matar», sonó la voz de un joven en el altavoz. Con una pancarta en mano, con los rostros de tres panistas que grabaron una llamada telefónica de Miroslava, para deslindar al exalcalde de Chínipas, Hugo Amed Schultz Alcaraz, de dar información para un reportaje de narcopolítica publicado en La Jornada y en la revista Proceso.
* Información e imagen de Proceso