De acuerdo a lo que publicó el día de hoy Cimacnoticias, el tema de la equidad de género no ha tenido hasta ahora relevancia, y en cambio, ha sido manipulado y utilizado como cualquier otro tema, a pesar de que se anunció como algo prioritario que llevaría a un consenso entre países, porque “no hay un interés real entre quienes toman las decisiones”, según subrayó Leonor Aída Concha, de la Red Nacional Género y Economía, en la marcha convocada por el Espacio Mexicano para el Diálogo (ESMEX).
Aída Concha resaltó interés de las organizaciones de mujeres, que se pretende que sean articuladas y participativas, no sólo en esa temática, sino en todas. Mencionó en que este espacio de la COP-16 se ha aprovechado para articular la perspectiva de género.
Las organizaciones con perspectiva de género, han trabajado durante las dos semanas que comprende la reunión internacional para que las decisiones a nivel oficial incluyan dicho tema en los compromisos, y no sólo en el discurso.
Leonor considera que “no hay esperanza de que esto va a cambiar, va a ser un Copenhague 2, porque las partes no están dispuestas a comprometerse, a cambiar las decisiones. No hay esperanza en cuestión de género, porque el tema sólo ha sido utilizado y manipulado como cualquier otro tema, no hay un interés real”.
La activista considera que el modelo económico que se tiene en México, no toma para nada en cuenta el aporte de trabajo de las mujeres, porque no las considera como agentes generadores económicos; en esta cuestión no es reconocido el trabajo de las ellas: “es histórico que el trabajo que realizamos no reconocido como trabajo, porque esa labor no está empatada, no está vinculada a la industria, no es reconocido el trabajo que las mujeres realizamos, no sólo el doméstico sino del cuidado que damos a las personas y esto está haciendo crisis en el modelo económico. Las injusticias cada vez son mayores. Por eso hay desigualdades e injusticias y si no fuera por el aporte de las mujeres no avanzaría esto”, sostuvo.
Alertó sobre el riesgo de incrementar la carga de trabajo para las mujeres, si en las decisiones para revertir el cambio climático, no se toma en cuenta la perspectiva de género.