Ciudad de México, 21 de mayo de 2021. Ante la notificación del Estado mexicano a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre su deseo de llegar a una solución amistosa en el caso Pasta de Conchos y ante los señalamientos respecto del rescate formulados ayer en la conferencia de prensa presidencial, las familias peticionarias ante la CIDH afirmaron que es necesario que el Gobierno federal cambie la pauta de diálogo hacia uno más respetuoso e incluyente.
«Las familias peticionarias ante la CIDH -madres, padres, hijos e hijas, viudas, hermanos- reconocemos que el presidente ha confirmado su compromiso con el rescate de nuestros mineros; sin embargo, el proceso de cumplimiento y diálogo de las y los peticionarios se ha visto entorpecido por la exclusión injusta de la que se nos ha hecho objeto sobre la base de definir arbitrariamente como víctimas solamente a viudas», abundaron.
Explicaron que como resultado de esta exclusión arbitraria, en las reuniones, consultas y compromisos hechos por el presidente, la secretaria del Trabajo y el subsecretario de Derechos Humanos, no se ha permitido estar presentes a los peticionarios ni a las organizaciones que les acompañan y tampoco se les ha tomado en cuenta como interlocutores.
«No se nos entregó la información acordada sobre los estudios que hizo el Servicio Geológico Mexicano -para los cuales colaboramos en todo lo que se nos pidió, sin que pudiéramos ver el resultado final- y que fueron entregados a CFE; no se nos permitió ingresar al evento presidencial del 26 de octubre en la mina Pasta de Conchos a pesar de que se trató de la firma de una comunicación ante la CIDH; no se nos proporciona información sobre los supuestos avances y no se ha dado respuesta a la carta que entregamos al director de CFE en la que pedimos una reunión para tratar dos temas fundamentales: a) establecer una ruta crítica para la obra de rescate; y b) la no repetición de siniestros y fallecimientos evitables en las minas de carbón», lamentaron.
Las familias que siguen el litigio interamericano pidieron a la CIDH una reunión de trabajo, en lo posible presencial y en la mina, con el fin de dialogar entre las partes sobre el seguimiento de los acuerdos, bajo condiciones que permitan la participación y el reconocimiento de las y los peticionarios en el litigio interamericano.
«En caso de que hubiera una interlocución en la que se garantice el acceso, información y participación a todas las y los peticionaros, se podría explorar una solución amistosa que cumpla con los estándares interamericanos en materia de reparación integral», adelantaron.
En febrero, al cumplirse 15 años de la explosión en la mina Pasta de Conchos, las y los deudos de los mineros exigieron que se avance en acciones concretas para que el rescate inicie el próximo 1 de septiembre, en cumplimiento del acuerdo del presidente de la República.
Desde entonces, las familias señalaron su preocupación por el hecho de que se haya excluido de importantes reuniones a familiares víctimas de la tragedia y recordaron que tanto la legislación nacional como la internacional no limitan el carácter de víctimas únicamente a las cónyuges.
Las familias de los obreros también puntualizaron que no han renunciado a la realización de una investigación con debida diligencia para asignar las responsabilidades asociadas a que ocurriera la tragedia, pues bajo un esquema de adecuada supervisión, pudo haberse evitado.