*Su estado de salud es malo; piden que el caso se encuadre bajo la Ley de Desaparición.
Ciudad de México, 30 de enero de 2018. Ciudadanos y organizaciones defensoras de derechos humanos exigieron que el caso del menor de edad Marco Antonio Sánchez Flores se investigue de acuerdo con la Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas y advirtieron que se debe poner atención a los mandos que “toleran u ordenan la desaparición forzada de personas”.
Por su parte, estudiantes, familiares y ciudadanos realizaron una manifestación ayer por la tarde en la que advirtieron del mal estado de salud del estudiante como consecuencia de la serie de abusos y omisiones de las autoridades, y pidieron a la sociedad no dejar el caso en la impunidad.
En un comunicado, las organizaciones de derechos humanos -como la Red TdT- recalcaron que el estudiante fue golpeado en vía pública, lo subieron a una patrulla y no lo presentaron ante ninguna autoridad; señalaron las omisiones de las autoridades y su negativa inicial a averiguar el paradero del muchacho.
Tras las declaraciones de las autoridades capitalinas, en las que insistieron que no hubo desaparición forzada y que las heridas no le dejarán «cicatriz perpetua» a la víctima, además de sostener que no hay «constancia» de que los policías lo hayan golpeado, a pesar del testimonio del joven que presenció la agresión, las organizaciones manifestaron su rechazo a “todo intento de desviar la investigación hacia tipos penales que no correspondan con los hechos narrados por testigos”.
“Lamentamos profundamente que el Gobierno de la Ciudad de México no demuestre las capacidades para actuar adecuadamente en la búsqueda de una persona que es detenida por policías de la Ciudad, siendo que, por el contrario, fue la ciudadanía la que se organizó y activó la búsqueda de Marco Antonio. Esta situación nos alarma, pues evidencia que, o no se cuenta con control sobre los elementos policiales, o que las omisiones en torno a la desaparición de este joven son acciones encaminadas a proteger a los perpetradores”, acusaron.
El 23 de enero, Marco Antonio Sánchez Flores, de 17 años, tomaba fotos a un mural a las afueras del metro Rosario cuando fue detenido por cuatro policías capitalinos. Mientras los policías afirman que una persona les pidió detenerlo (persona de la que no hay registro), un amigo del joven, testigo de los hechos, describió una detención arbitraria. En una imagen del momento se observa al joven tumbado en el suelo, sometido por policías. El joven no fue presentado ante Ministerio Público, el supuesto ciudadano que pidió su detención no apareció nunca y las autoridades se negaron a investigar la desaparición hasta pasadas 48 horas.
El estudiante de 17 años, aficionado al deporte y la fotografía, fue localizado gracias a un reporte ciudadano que lo ubicó en Melchor Ocampo, Estado de México, luego de conocerse que policías del municipio de Tlalnepantla lo presentaron a las autoridades debido a que pensaron que se estaba intentando suicidar. Luego lo dejaron libre, sin comprobar si era buscado. Debido al mal estado en el que fue encontrado, Marco Antonio fue trasladado al hospital psiquiátrico Juan N. Navarro. Diversos medios de comunicación filtraron partes de un supuesto expediente del menor de edad.