*La delegación mexicana rechazó todos los señalamientos del organismo y de la sociedad civil mexicana.
Ciudad de México, 8 de abril de 2016. Los integrantes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos lamentaron que el gobierno mexicano rechace la realidad: que el país enfrenta una grave crisis de derechos humanos. Señalaron que esa postura niega el principio de realidad y es una manifestación de «esquizofrenia».
Durante la 157 sesión del organismo interamericano, en la sesión dedicada a la “Situación general de los derechos humanos”, solicitada por el propio Estado mexicano, la sociedad civil expuso ejemplos de violaciones sistemáticas a los derechos humanos, como ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas, tortura, desplazamiento forzado y ataques contra periodistas.
Al rechazar el reciente informe de país de la Comisión por «parcial, incompleto y no objetivo», el subsecretario para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Miguel Ruiz Cabañas, insistió en que la violencia en nuestro país la generan los criminales y no el Estado.
Nancy López, de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, lanzó que la sociedad está harta “de la impunidad dirigida por el gobierno”.
Al defender el papel del Ejército en las calles -situación que ha dado lugar a graves violaciones a derechos humanos-, el diplomático aseguró que cuando los militares violan los derechos humanos de civiles son investigados en el fuero civil. La sorganizaciones argumentaron que casos como Tlatlaya demuestran que esa afirmación es falsa.
Los comisionados reclamaron al Estado la campaña de difamación contra el Grupo Interdisciplinar de Expertos Independientes (GIEI) que supervisa el caso Ayotzinapa, situación que los representantes del gobierno peñista negaron.
Además de la audiencia general, se realizaron sesiones sobre Derechos de las personas privadas de la libertad y la privatización del sistema penitenciario, Desapariciones de niños, niñas y adolescentes y Acceso a la información y restricciones indirectas a la libertad de expresión, en la que destacó la presencia de la periodista Carmen Aristegui.
Edison Lanza, relator especial para la Libertad de Expresión de la CIDH, pidió al gobierno mexicano que se le permita a él y al relator para la libertad de expresión de la ONU hacer una visita al país.