*Se deben dar garantías para su trabajo, insisten.
Ciudad de México, 16 de febrero de 2016. Centenares de mujeres defensoras de derechos humanos de El Salvador, Guatemala, Honduras, México y Nicaragua, integrantes de la Iniciativa Mesoamericana de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos (IM-Defensoras), repudiaron el asesinato de la periodista veracruzana Anabel Flores Salazar el pasado 8 de febrero, el catorceavo perpetrado en México contra una mujer periodista desde 2002 y el tercero en el estado de Veracruz desde 2011, bajo el mandato del gobernador Javier Duarte. También destacaron la violencia que sufren las mujeres activistas.
«Este último crimen se produce después de que en noviembre de 2015 el gobernador firmara el ‘Convenio de Colaboración Interinstitucional para instrumentar el Programa de Políticas a favor de las y los periodistas que desarrollan el ejercicio de la Libertad de Expresión en el Estado de Veracruz'», criticaron.
Las defensoras destacaron que la situación en Veracruz no es un hecho aislado, pues México ocupa el primer lugar en asesinatos de periodistas en América Latina y el séptimo del mundo según en el Balance de periodistas asesinados en el mundo 2015 realizado por la organización internacional Reporteros Sin Fronteras.
«Este panorama, lejos de cesar, tiende a agravarse. En los últimos meses constatamos un incremento significativo en los ataques contra mujeres periodistas», señalaron las integrantes de la iniciativa. «El clima de riesgo que enfrentan las mujeres periodistas en el país responde a un contexto generalizado de violencia e impunidad que afecta en igual medida a las mujeres defensoras de derechos humanos».
La violencia, además de a comunicadoras, alcanza a madres que buscan a sus hijos e hijas desparecidas, madres que buscan justicia por sus hijas víctimas de feminicidio, esposas de presos políticos, lideresas campesinas y comunitarias que se oponen a la imposición de megaproyectos y defensoras de los derechos de las mujeres y de la diversidad sexual.
Del 2012 al 2014, la Red Nacional de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos en México (RNDDHM) documentó 615 agresiones contra mujeres periodistas y defensoras de derechos humanos con una tendencia al alza: 118 en 2012, 189 en 2013 y 308 en 2014. «Ante ello, el papel del Gobierno Federal es de absoluta omisión, con un Mecanismo Oficial de Protección plagado de fallas cuando no inoperante; e incluso de desacato ante instancias internacionales», reclamaron las defensoras.
Destacaron la campaña de difamación contra las fiscales Ángela Buitrago y Claudia Paz y Paz del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), designadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para el caso Ayotzinapa, y los constantes ataques contra mujeres articulistas y periodistas que visibilizan la grave situación de los derechos humanos de México.
La Iniciativa Mesoamérica de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos exigió, para enfrentar este panorama, que se investigue debidamente el feminicidio de la periodista Anabel Flores Salazar, así como el del resto de mujeres y defensoras asesinadas en México; aue se garantice y se implementen las condiciones para que, desde una perspectiva de género, todas las mujeres periodistas y defensoras de derechos humanos puedan ejercer de manera libre y segura su labor; que se cumplan e implementen todas las recomendaciones dictadas por los mecanismos internacionales de derechos humanos a favor de las mujeres defensoras y periodistas para que sea garantizada su labor en condiciones de seguridad y sin temor a represalias, y que se promueva y reconozca públicamente la importancia y el valor fundamental de la labor de las mujeres defensoras de derechos humanos y periodistas de cara a la trasformación social.