* Alertan de nuevos riesgos a partir de la reforma energética.
Ciudad de México, 18 de noviembre de 2015. Comunidades mixtecas, chatinas y afromexicanas rechazaron proyectos de presas hidroeléctricas y minas durante el Foro Regional: “Ríos y Montañas en Peligro” – Los Pueblos y su Derecho al Territorio, realizado el 14 de noviembre en la cabecera del municipio de Tataltepec de Valdés, Oaxaca.
Durante el encuentro, las 51 comunidades, 17 organizaciones civiles y más de 400 personas, que desde hace muchos años se han organizado para defender tierras y bienes comunes frente a proyectos de desarrollo e infraestructura, compartieron estrategias de resistencia y defensa del territorio. «Consideramos que nos debemos coordinar de manera más activa e informarnos porque compartimos problemáticas comunes. Además, reconocemos que se han activado nuevos riesgos que se desencadenan a la luz de la reforma energética aprobada por el Congreso y el gobierno federal», alertaron en su pronunciamiento final. .
Los asistentes informaron que existen al menos 14 proyectos proyectos hidroeléctricos en la costa de Oaxaca, además de varios proyectos mineros. «Muchos de ellos, en su momento los rechazamos de manera organizada, pero hoy han sido relanzados por autoridades federales en conjunto con el gobierno de Oaxaca. Reiteramos que este tipo de estrategias vulneran desde nuestro derecho al acceso a la información, hasta el derecho a preservar nuestros territorios y decidir sobre nuestro propio desarrollo», declararon.
Las comunidades y activistas presentes reiteraron que los proyectos de presas y de minas generan graves daños en sus territorios y medio ambiente, devastan el agua y ponen en riesgo la continuidad de su vida como pueblos, además de generar daños sociales y culturales, pues «nos dividen para permitir la entrada de empresas trasnacionales. También son devastadores de nuestro medio ambiente pues buscan inundar nuestras tierras y usan químicos que contaminan el agua, el suelo, el subsuelo e incluso el propio aire que respiramos», analizaron.
Las nuevas leyes relativas al territorio y a la reforma energética «son continuidad de programas anteriores que han buscado desnaturalizar el carácter social y colectivo de nuestras tierras, para individualizarlas, como en su caso fue PRODECE ahora FANAR. Por ello, reivindicamos nuestras tierras indígenas, nuestra propiedad ancestral y el poder de decidir sobre las mismas y los bienes comunes. Este foro también respalda a nuestras autoridades agrarias, muncipales y comunitarias en sus acciones de defensa del territorio en la región de la costa», insistieron.