* Desconocidos causaron destrozos en la sede del organismo en Torreón, Coahuila
Ciudad de México, 17 de noviembre de 2015. Los ataques del 10 de noviembre contra la sede del Centro de Derechos Humanos Juan Gerardi son un ataque contra su labor y demuestran que el Mecanismo Nacional de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas «no es una instancia eficiente ni eficaz», consideró el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas.
El 10 de noviembre, colaboradores del centro llegaron por la mañana a las instalaciones y se encontraron con destrozos en la parte exterior del edificio, destruído el video portero que vigila el acceso y rotos los cristales de las puertas y ventanas de la librería parroquial adjunta a las oficinas.
El Centro Juan Gerardi es beneficiario de medidas de protección del Mecanismo Nacional de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, «sin embargo estas medidas no se han cumplimentado eficazmente ya que los rondines policiacos para disuadir cualquier acción de amenaza se han dejado de realizar», denunció el Frayba.
Los ataques evidencian «el riesgo en el que nuestro trabajo se desarrolla» y «atentan en contra de nuestra actividad de defensa, protección y promoción de los derechos humanos, y vulneran la seguridad de todas las personas que colaboramos en este centro», destacaron las y los defensores del centro atacado en un comunicado.
En septiembre de 2013, individuos irrumpieron en las instalaciones del Centro y extrajeron dos computadoras con información sensible y confidencial en las que se documentaban casos de derechos humanos. En febrero de 2012, miembros del Ejército, la Policía Federal y la Policía Estatal de Coahuila, a bordo de cinco camionetas, irrumpieron en las instalaciones de la Parroquia de San Judas Tadeo donde se encuentra también el Centro de Derechos Humanos, y sin presentar orden judicial alguna, sin identificarse y sin pedir permiso ingresaron a las instalaciones y comenzaron a pedir información de lo que ahí se hacía.y revisar todo lo que se encontraba en la oficinabajo el pretexto de «buscar droga».