Información Sididh, La edición de hoy, Uncategorized — enero 13, 2015 at 9:00 am

Ya son 43 años de la ejecución extrajudicial de Diego Lucero

*Exigen justicia para este caso y la presentación con vida de normalistas; demandan respeto a derechos humanos

Diego Lucero Martínez
Diego Lucero Martínez

México DF, 13 de enero 2015. El próximo 15 de enero se cumplen 43 años de la ejecución extrajudicial de Diego Lucero Martínez, luchador social y revolucionario, ejecutado en Chihuahua en 1972, junto con otros de sus compañeros.

El 16 de enero de 1972, fue ejecutado extrajudicialmente Diego Lucero, quien había sido detenido un día antes por integrantes de la policía judicial estatal y luego interrogado por agentes de la Dirección Federal de Seguridad, que encabezaban el capitán Luis de la Barreda Moreno y Miguel Nazar Haro, ambos ya fallecidos sin recibir el castigo por los delitos de lesa humanidad en los que estuvieron involucrados.

Recordamos que hace 43 años cayeron en combate Avelina Gallegos y Oscar Montes siendo detenidos, torturados y posteriormente ejecutados extrajudicialmente Ramiro Díaz, Gaspar Trujillo y Diego Lucero Martínez, a quienes “hoy rendimos homenaje y en cuya memoria reivindicamos el compromiso de continuar en la lucha por la verdad y por la justicia”.

Las ejecuciones extrajudiciales de Diego Lucero Martínez y sus compañeros, como las de decenas de hombres y mujeres que se comprometieron a transformar la sociedad y enfrentar un sistema anti democrático y autoritario que controlaba y oprimía las luchas populares, son algunos de los delitos de lesa humanidad que permanecen impunes.

En este contexto, la Fundación Diego Lucero exige la presentación con vida de los normalistas de Ayotzinapa, rechazan la criminalización de las protestas sociales y demandan verdadero respeto a los derechos humanos.

LA IMPUNIDAD PERMANECE

Las masacres del 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco y la del 10 de junio de 1971 en San Cosme; la desaparición forzada de más mil 200 detenidos desaparecidos, las decenas de ejecuciones extrajudiciales, las torturas a innumerable número de personas durante la mal llamada “guerra sucia” del pasado -en realidad se instrumentó una estrategia de terrorismo de Estado para reprimir a los movimientos sociales y organizaciones políticas de oposición, particularmente a las que ante el autoritarismo imperante optaron por la vía armada-, entre otros delitos de lesa humanidad, explica en gran medida que en la actualidad persistan prácticas represivas que violan los preceptos constitucionales y los derechos humanos, enfatizó la Fundación Diego Lucero.

Cabe destacar, que ante la negación de justicia en México, familiares y organizaciones defensoras de los derechos humanos, acuden ante organismos internacionales como una manera de presionar al Estado mexicano para que cumpla con sus obligaciones legales y constitucionales.