Ya en este mismo espacio habíamos hablado sobre la inconsistente y dudosa política de comunicación social de la CNDH, en virtud de que difunde los resultados de su trabajo de manera inconsistente y opaca. Al menos eso es lo que deja ver su política de comunicación social en relación con las recomendaciones emitidas, especialmente aquellas en las que se involucra a la Sedena.
Las tres recomendaciones más recientes fueron emitidas el día 6 de octubre y hasta el momento la CNDH no ha emitido un boletín al respecto. La situación no es menor, si tomamos en cuenta que dichas investigaciones de la CNDH no han sido retomadas por los medios de comunicación, con excepción de Notimex que retomó la recomendación 62/2009 que aborda un caso de negligencia médica contra el señor José Humberto Aguilar Castillejos en un hospital militar y Reforma (que tiene acceso restringido a su portal) que refirió las recfomendaciones en su edición on line hoy por la tarde.
Sin embargo no ha sido retomado por medios la recomendación 61/2009 que refiere el caso de A1 detenido arbitrariamente en un cateo ilegal por miembros del ejército y A2 dtenido posteriormente. Ambos fueron torturados, aparentemente en instalaciones militares. Tampoco ha sido retomada la recomendación 63/2009, que habla de tratos cruelespor parte de militares en contra de Rubén Coxcahua Marín, quien fue detenido en presunta posesión de 35 envoltorios de mariguana. Esta situación hace evidente una política inconsistente de comunicación social que minimiza el impacto público de las recomendaciones.