Tan sólo en Chihuahua 1450 quejas contra militares

  • 13 personas detenidas por militares han desaparecido en ese periodo

  • Corte IDH acepta oficialmente el caso de Valentina Rosendo

Desde que se implementó el operativo Conjunto Chihuahua, la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Chihuahua ha documentado 1450 quejas por violaciones de derechos humanos por parte del Ejército, señaló ayer Gustavo de la Rosa Hickerson, primer visitador de la CEDH. La mayor parte han sido por torturas, desapariciones y cateos ilegales, señaló el funcionario. De igual manera destacó la existencia de 13 denuncias por desaparición forzada contra personas que fueron detenidas en el contexto de los operativos. Uno de estos casos es el de Jaime Rodríguez Prieto, policía municipal detenido en Nicolás Bravo, Chihuahua por militares el día 13 de marzo.

Según testimonios de testigos de los hechos, Rodríguez prieto fue “levantado” por militares en vehículos particulares. También se señala que familiares de los varios detenidos que ocurrieron ese día vieron que los vehículos ingresaron a las instalaciones del Ejército Mexicano que se encuentran sobre la calle Barranco Azul en Ciudad Juárez. A pesar de ello ninguna autoridad les ha dado respuesta sobre el paradero de su familiar. Su hermano Manuel afirma que “Nosotros hacemos responsables a los que están en la Operación Conjunta Chihuahua de lo que le haya pasado a mi hermano, porque fueron militares los que se lo llevaron”.

De la Rosa Hickerson señala que a pesar de la gravedad del asunto, la situación ha mejorado recientemente pues antes las personas eran retenidas en instalaciones militares hasta por 15 días, mientras que ahora sólo las mantienen unas 48 horas.

Caso Valentina Rosendo a la CIDH

Por otra parte los medios de comunicación dieron a conocer que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) decidió presentar la demanda ante la corte por el caso de la indígena tlapaneca Valentina Rosendo Cantú, quien fue agredida sexualmente por militares en el año 2002. Anteriormente ya se había sometido el caso de Inés Fernandez, quien también fue agredida sexualmente por militares en la misma época. El Centro de derechos humanos de la Montaña de Guerrero Tlachinollan lleva estos casos.