*Opinión
Por Fernando Ríos/Centro Prodh
¿Qué pasaría si se aprueba por las dos Cámaras de EUA la legalización de más de 11 millones de personas que residen en el país sin los permisos correspondientes?
1.- Lo primero que hay que notar es que el sistema político estadounidense funciona de manera distinta al de México y por tanto aunque el Senado ha aprobado la propuesta de reforma aún falta que la Cámara de Representantes apruebe su respectivo proyecto. La discusión de ambos proyectos puede arrojar postulados adversos a los esperado por millones de migrantes.
2.- Existe una fuerte tendencia antiinmigrante entre los legisladores, así que una de las medidas inobjetables será sellar la frontera para evitar que más personas lleguen. Esto producirá una barrera difícil paso para migrantes centroamericanos y mexicanos que buscan el “sueño americano”. El incremento de muertos por ese muro que medirá alrededor de 1,200 kilómetros, así como por miles de agentes de seguridad más y por los drones no tripulados será el resultado de esta política propia de una recesión económica.
3.- Los millones de migrantes que llegaron a EUA antes del 31 de diciembre de 2011 con mucha esperanza aplicarán al “registro provisional”. Mientras tendrán que aprender inglés, pagar multas y cuidarse de cualquier incidente que manche su expediente legal. ¿Cómo será ese proceso? ¿Qué pasará con todos aquellos que decidieron salir de las sombras para luego volver a ellas?
4.- De llegar a aprobarse, México verá disminuido el ingreso por remesas, la segunda fuente de recursos, que sin embargo en los últimos años se ha estancado e incluso disminuido
5.-Las y los migrantes centroamericanos encontrarán más dificultades en su tránsito por México. Los homicidios, secuestros, extorsiones, detenciones arbitrarias, tratos crueles e inhumanos continuarán e incluso se agudizarán por las acciones del Instituto Nacional de Migración (INM). Las ofertas recientes de agencias gubernamentales estadounidenses de colaborar con México para evitar a migrantes centroamericanos buscarán medidas más restrictivas y abusivas. Personas hondureños, guatemaltecos, salvadoreños y nicaragüenses buscarán rutas más peligrosas y arriesgadas.
Poco podemos esperar de la reforma migratoria, los sueños de millones de personas de acceder a una migración ordenada transitarán por muchas dificultades y no pocas veces se verán obligadas a volver al punto de donde salieron. Los desafíos para los defensores de migrantes centroamericanos aumentarán y con éstos seguramente también las amenazas.
Sin embargo, también podemos esperar mejores condiciones de vida para miles de migrantes que serán reconocidos como personas con todos los derechos en la tierra que decidieron florecer.