Por Luis Eliud Tapia Olivares/CentroProdh
El pasado 8 de marzo, luego de infructuosas negociaciones entre los transportistas del servicio urbano de la ciudad de Tuxtepec y las autoridades estatales de la Secretaría de Transporte y Vialidad del Estado de Oaxaca para que las autorizaran un alza en los precios del servicio de transporte público, los transportistas decidieron eliminar el subsidio para las y los estudiantes de las escuelas secundarias y preparatorias de la región previendo que las niñas y los niños no se iban a quejar del aumento a las tarifas.
Pero contrario a lo pensado, 11 de marzo estudiantes de varios planteles educativos de nivel secundaria y preparatoria salieron a las calles a manifestarse para mostrar su inconformidad por el aumento a las tarifas del transporte, sosteniendo además que varios de los vehículos usados para el servicio urbano están en un muy mal estado, sólo contaminan y que existe una necesidad imperiosa de renovarlos.
Luego de lo anterior, ante intentos poco claros de negociación por parte gobierno del estado de Oaxaca encabezado por Gabino Cué Monteagudo y frente a la indiferencia absoluta de Presidente Municipal de Tuxtepec, José Manuel Barrera Mojica, los días martes 12 y miércoles 13 las manifestaciones aumentaron de intensidad, en diferentes puntos de la ciudad, los estudiantes incendiaron llantas de vehículos para expresar su reproche por la nula intervención de las autoridades municipales y estatales en el conflicto, tomaron algunos accesos a la ciudad y se concentraron en distintas plazas. Asimismo, estudiantes de universidades locales, representantes del magisterio y algunos padres de familia se unieron a las marchas.
Para el 14 de marzo, la situación que reinó en Tuxtepec fue de desconcierto total debido a que en horas de la mañana existió una supuesta propuesta de solución por parte del gobierno estatal que derivó en un aumento de tensión entre estudiantes y chóferes de las unidades del transporte público. Los concesionarios y dueños del servicio de transporte urbano ordenaron a los chóferes de los vehículos que recuperaran sus autobuses. Versiones indican que ha habido enfrentamientos violentos donde varias y varios estudiantes han resultados con lesiones infringidas por los chóferes. Lo anterior consta en distintas imágenes y videos subidos a las redes sociales tanto por medios de comunicación locales como por habitantes de la citada ciudad.
Frente a los acontecimientos, la policía municipal y estatal en principio permaneció pasiva pero el día jueves tomó partido a favor de los transportistas. Hasta el día de hoy permanece un ambiente de tensión en la ciudad.